Un coche fúnebre recorre las calles de Medellín. Un director yace en un ataúd y recuerda los preparativos de su primera película, un filme de serie B oscuramente erótico sobre fantasmas que habitan entre los vivos porque ya no hay sitio para ellos en los cementerios. Muchos de sus actores murieron antes de rodar la película. La película resultante también trata de fantasmas, pero es diferente a lo planeado.

ANHELL69 es una película documental, y como tal recibió el premio a la mejor película en la competición internacional del Festival de Cine Documental de Leipzig. El metraje documental se combina con escenas de largometraje. Al igual que en su cortometraje SON OF SODOM (2020), Theo Montoya retrata la contramagia queer de una generación joven que tiene que hacer frente a la vida cotidiana en la violenta ciudad colombiana de Medellín y que quiere celebrar el presente en lugar del futuro. Les permite articular sus sueños, deseos y esperanzas. Breves momentos de utopía se vislumbran en un mundo distópico antes de ser anulados por la vida cotidiana.